Un año más, los hermanos de la Santa Vera Cruz de Martos renuevan su compromiso con los vecinos del barrio de la Cruz del Lloro, contribuyendo activamente en la instalación de una caseta en la verbena del barrio. Este gesto, que ya es una tradición, refuerza los lazos de unión y solidaridad entre la hermandad y la comunidad, brindando un espacio de encuentro y celebración para todos.
El barrio de la Cruz del Lloro se ha convertido en uno de los núcleos urbanos más importantes de nuestra ciudad, caracterizado por su alta participación vecinal y su creciente población. Muchos de nuestros hermanos han vivido su juventud en sus calles, han formado amistades duraderas. También es el lugar donde realizan sus compras diarias, comparten momentos de unión y fraternidad, y, en definitiva, construyen su historia personal. La Cruz del Lloro es un barrio lleno de vida, un lugar agradable para vivir y crecer, donde el día a día se transforma en una oportunidad constante de convivencia.
No obstante, la rutina cotidiana de sus vecinos se interrumpe cada año, durante el mes de septiembre, con la llegada de las esperadas Fiestas del Barrio. Durante este fin de semana, el ambiente se llena de música, risas y el inconfundible aroma a plancha y churros, creando un entorno de celebración que muchos esperan con ansias. Es una oportunidad para reencontrarse con los orígenes, para disfrutar de la buena compañía de familiares, amigos y vecinos que, en su mayoría, han crecido juntos en estas calles.
Como no podía ser de otra manera, la Hermandad de la Santa Vera Cruz de Martos ha vuelto a participar activamente en las fiestas del barrio de la Cruz del Lloro, como lo ha venido haciendo desde hace tantos años. Con el tesón, la dedicación y el esfuerzo de sus hermanos, quienes de manera altruista ofrecen lo mejor de sí mismos, hacen posible que estas celebraciones sean el colofón perfecto a una buena comida o cena. Porque, ¿quién podría resistirse a disfrutar de un buen churrasco, chorizo o pincho mientras comparte momentos de convivencia con sus vecinos?
La Hermandad Crucera se ha consolidado como una gran familia, y con cada edición de las fiestas, demuestra su compromiso y su entrega para que el barrio siga creciendo y sus celebraciones se mantengan como un referente. Esto es debido a que no solo aportan su trabajo, sino también su espíritu fraternal, que contagia a todos los asistentes y hace que el ambiente sea aún más especial.
Este esfuerzo incansable no pasa desapercibido. Los vecinos del barrio han expresado su agradecimiento a la Hermandad, reconociendo su importante contribución para que las fiestas de la Cruz del Lloro sigan siendo un momento de unión y alegría, donde cada rincón se llena de vida, música y, sobre todo, del calor humano que caracteriza a esta comunidad.
Desde la Hermandad agradecidos, y teniendo como eje central en nuestro trabajo el amor a Dios y a nuestros amantísimos titulares, decimos GRACIAS a todos los hermanos cruceros que han hecho posible que una vez más la CASETA CHICOTÁ abriesen sus puertas, invirtiendo su tiempo, su esfuerzo y su trabajo altruistamente al servicio de su Hermandad, finalizando de esta manera la jornada de CASETAS 2024.
GRACIAS, GRACIAS y GRACIAS!
Los Hermanos de la Santa Vera Cruz, finalizado el servicio de comidas |
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